JUEVES SANTOLA CENA DEL SEÑOR

Ambientación inicial:

La celebración del Jueves Santo es la puerta de entrada al Triduo Pascual, en el que la Iglesia hace memoria de la muerte y resurrección del Señor. Jesús va a pasar de este mundo al Padre amando a los suyos hasta el extremo.  A partir de este momento, la celebración de la Eucaristía será la Nueva Pascua cristiana. Jesús dijo: “Haced esto en memoria mía”. Y nosotros lo repetimos para que esté en medio de su comunidad y sigamos su ejemplo de servicio humilde, sencillo, atento, personal.            Vivamos con intensidad este momento, dejándonos transformar por la Palabra de Dios y por la comunión de su cuerpo y de su sangre, y así crezca la fraternidad entre todos nosotros y con todos los demás.

Rito penitencial:

  • Tú que nos ayudas a superar las barreras del individualismo, la indiferencia y el rechazo. Señor, ten piedad.
  • Tú que nos ayudas a verte en el rostro de los más vulnerables y débiles. Cristo, ten piedad.
  • Tú que nos ayudas a ver las realidades de este mundo con tus ojos de misericordia. Señor, ten piedad.

Ambientación a la Palabra:

La palabra que hoy se nos regala nos invita a hacer memoria del paso de Dios por nuestra historia personal y colectiva. Nos invita a hacer memoria del Señor Jesús, de sus palabras y de sus gestos, testamento definitivo para nuestro caminar como discípulos suyos. Nos invita a celebrar la Eucaristía, Pascua Cristiana. “Haced esto en Memoria Mía”.

Lectura del libro del Éxodo              12, 1-8. 11-14

                El Señor dijo a Moisés y a Aarón en la tierra de Egipto: “Este mes será para ustedes el mes inicial, el primero de los meses del año. Digan a toda la comunidad de Israel:
«El diez de este mes, consíganse cada uno un animal del ganado menor, uno para cada familia. Si la familia es demasiado reducida para consumir un animal entero, se unirá con la del vecino que viva más cerca de su casa. En la elección del animal tengan en cuenta, además del número de comensales, lo que cada uno come habitualmente.
Elijan un animal sin ningún defecto, macho y de un año; podrá ser cordero o cabrito. Deberán guardarlo hasta el catorce de este mes, y a la hora del crepúsculo, lo inmolará toda la asamblea de la comunidad de Israel. Después tomarán un poco de su sangre, y marcarán con ella los dos postes y el dintel de la puerta de las casas donde lo coman. Y esa misma noche comerán la carne asada al fuego, con panes sin levadura y verduras amargas.
Deberán comerlo así: ceñidos con un cinturón, calzados con sandalias y con el bastón en la mano. Y lo comerán rápidamente: es la Pascua del Señor.
Esa noche yo pasaré por el país de Egipto para exterminar a todos sus primogénitos, tanto hombres como animales, y daré un justo escarmiento a los dioses de Egipto. Yo soy el Señor.
Esa noche yo pasaré por el país de Egipto para exterminar a todos sus primogénitos, tanto hombres como animales, y daré un justo escarmiento a los dioses de Egipto. Yo soy el Señor.
La sangre les servirá de señal para indicar las casas donde ustedes estén. Al verla, yo pasaré de largo, y así ustedes se librarán del golpe del Exterminador, cuando yo castigue al país de Egipto.
      Este será para ustedes un día memorable y deberán solemnizarlo con una fiesta en honor del Señor. Lo celebrarán a lo largo de las generaciones como una institución perpetua.”

SALMO Sal 115, 12-13. 15-16bc. 17-18

R.            El cáliz que bendecimos es la comunión de la Sangre de Cristo.

                ¿Con qué pagaré al Señor
                todo el bien que me hizo?
                Alzaré la copa de la salvación
                e invocaré el nombre del Señor.  R.

                ¡Qué penosa es para el Señor
                la muerte de sus amigos!
                Yo, Señor, soy tu servidor,
                tu servidor, lo mismo que mi madre:
                por eso rompiste mis cadenas.  R.

                Te ofreceré un sacrificio de alabanza,
                e invocaré el nombre del Señor.
                Cumpliré mis votos al Señor,
                en presencia de todo su pueblo.  R.

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto  11, 23-26

                Hermanos: Lo que yo recibí del Señor, y a mi vez les he transmitido, es lo siguiente:
                El Señor Jesús, la noche en que fue entregado, tomó el pan, dio gracias, lo partió y dijo: “Esto es mi Cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía.”
                De la misma manera, después de cenar, tomó la copa, diciendo: “Esta copa es la Nueva Alianza que se sella con mi Sangre. Siempre que la beban, háganlo en memora mía.”
                Y así, siempre que coman este pan y beban esta copa, proclamarán la muerte del Señor hasta que él vuelva.

Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según san Juan             13, 1-15

                Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, él, que había amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el fin.
                Durante la Cena, cuando el demonio ya había inspirado a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregarlo, sabiendo Jesús que el Padre había puesto todo en sus manos y que él había venido de Dios y volvía a Dios, se levantó de la mesa, se sacó el manto y tomando una toalla se la ató a la cintura. Luego echó agua en un recipiente y empezó a lavar los pies a los discípulos y a secárselos con la toalla que tenía en la cintura.
                Cuando se acercó a Simón Pedro, este le dijo: “¿Tú, Señor, me vas a lavar los pies a mí?”
                Jesús le respondió: “No puedes comprender ahora lo que estoy haciendo, pero después lo comprenderás.”
                “No, le dijo Pedro, ¡tú jamás me lavarás los pies a mí!”
                Jesús le respondió: “Si yo no te lavo, no podrás compartir mi suerte.”
                “Entonces, Señor, le dijo Simón Pedro, ¡no sólo los pies, sino también las manos y la cabeza!”
                Jesús le dijo: “El que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque está completamente limpio. Ustedes también están limpios, aunque no todos.” Él sabía quién lo iba a entregar, y por eso había dicho: “No todos ustedes están limpios.”
                Después de haberles lavado los pies, se puso el manto, volvió a la mesa y les dijo: “¿comprenden lo que acabo de hacer con ustedes? Ustedes me llaman Maestro y Señor, y tienen razón, porque lo soy. Si yo, que soy el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, ustedes también deben lavarse los pies unos a otros. Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo hice con ustedes.”

Oración de los fieles:

  • Para que entendamos con mayor claridad que la eucaristía hace la Iglesia para que la Iglesia sea eucaristía ella misma a favor de todos los hombres, haciéndose pan para los necesitados y recreando en todos la unidad y la solidaridad. Roguemos al Señor.
  • Por los que ejercen la autoridad en los pueblos, para que promuevan el desarrollo, la justicia y la paz. Roguemos al Señor.
  • Por todos los que sufren a causa del desamor, de la violencia y la miseria, para que sean amados y aliviados. Roguemos al Señor.
  • Por los hombres y mujeres de todos los pueblos y naciones, para que, siendo impulsores de valores perennes, promuevan la paz, la reconciliación, el desarrollo y la solidaridad. Roguemos al Señor.
  • Para que el Señor nos enseñe a vivir la eucaristía no sólo como transformación de los elementos del pan y vino, sino, ante todo, como transformación de las personas en él. Roguemos al Señor.
  • Por los que formamos esta comunidad, para que sepamos escuchar y vivir el evangelio del amor, comprometiendo nuestra existencia en llevar esperanza a los que nos rodean. Roguemos al Señor.

Después de la comunión:

Hacernos pan, Señor, es lo que hoy te pedimos.
Hacernos pan partido y vino alegre y derramado.
Hoy es fiesta, Señor, la fiesta de la vida,
porque comiéndote, Jesús, sabremos ser comida.
Haz que esta tarde, al comulgar tu pan
y al comulgar tu vino,
nos unamos a ti entregando nuestras vidas
para que el pan de cada día, en este mundo,
sea un pan para todos los que lo necesitan.

JUEVES SANTO -2021- HORA SANTA

Ambientación:

            Vamos a acompañar juntos a Jesús en esta noche de Jueves Santo. Aunque es de noche, esta hora es una hora de luz y queremos que Él nos ilumine. Esta es la hora del amor, prolongación del amor hasta el extremo que hemos celebrado esta tarde. Las palabras de Jesús, los signos que realizó, los gestos inolvidables durante la Última Cena proclaman su generosidad desbordante y su amor incondicional.
            Antes de entregarse a la muerte quiso darnos la prueba suprema del amor y enseñarnos cómo tenemos que amar a los demás, al prójimo, al hermano. En la escuela de Jesús, próxima a la cruz, podemos hoy aprender la gran lección que Él nos brinda: cómo amar. Abrámonos al Espíritu, ese fuego misterioso que arde en lo más hondo de nuestro corazón. Miremos a Cristo y permanezcamos en esta hora cerca de Él.

Canto: QUE BIEN SE YO LA FONTE, QUE MANA Y CORRE
             QUE BIEN SE YO LA FONTE, AUNQUE ES DE NOCHE

A) SERVIR

Del evangelio según san Juan:

            Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo.
            Estaban cenando… se levanta de la cena, se quita el manto y, tomando una toalla, se la ciñe; luego echa agua en la jofaina y se pone a lavarles los pies a los discípulos, secándoselos con la toalla que se había ceñido.
            Llegó a Simón Pedro y éste le dijo:
            Señor, ¿lavarme los pies tú a mí?
            Jesús le replicó:
            Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora, pero lo comprenderás más tarde.
            Pedro le dijo:
            No me lavarás los pies jamás.
            Jesús le contestó:
            Si no te lavo, no tienes nada que ver conmigo.
            Simón Pedro le dijo:
            Señor, no sólo los pies, sino también las manos y la cabeza.
            ¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros?
            Os he dado ejemplo para que lo que yo he hecho con vosotros, vosotros también lo hagáis.

Canto: “He venido a servir”

Quien quiera ser grande,
quien quiera ser el primero,
sea el esclavo de todos,
sea el más pequeño.
No he venido a ser servido
que he venido a servir
y a dar la vida por todos
para que todos puedan vivir (2)
en plenitud (3)

Reflexión: Jesús sustituye la ritualidad de la Cena  por su significado más profundo: servir, considerar a los demás como superiores a nosotros mismos. Nos dice que hagamos hoy, en nuestro contexto social actual y cultural, lo mismo que él hizo en el suyo. La Eucaristía es la máxima cercanía a los demás. Es comunión. Sería contradictorio celebrar la Eucaristía y no anonadarse, no servir, no amar. Dejarse lavar los pies es aceptar esta propuesta.

Salmo: ¿Lavarme Tú a mí los pies?

¿Lavarme Tú a mí los pies?
Y si es necesario, Señor, todo mi pobre ser.
¡Lávame y purifícame!
Hazme comprender que el camino del servicio
es una llave que abre la puerta del cielo.
Que servir, aún sin ser recompensado,
es garantía de que soy de los tuyos.

Por eso, Señor, ¡lávame!
Pero, te pido Señor, que no te inclines demasiado.
Soy yo quien, en este Jueves de tanto amor,
necesito plegarme en mi orgullo.
Soy yo quien en estas horas memorables,
estoy llamado a conquistar tu corazón
ofrendándome a los hombres.

¡Lávame, mi Señor!
Para que mis manos,
puedan acariciar rostros doloridos.
Para que mis pies,
puedan acompañar hermanos perdidos.

Me has amado y, al amarme,
brota en mí lo que Tú sembraste:
amor por los que me rodean,
amor hacia los que me piden,
pasión por los más débiles.
Sí, mi Señor, haré lo que Tú quieras.

Canto oracional:

“Ubi cáritas et amor
  Ubi cáritas, Deus ibi est

  • Caridad es ser paciente con los que llaman a nuestra puerta.
  • Caridad es ser amable y cariñoso con quien llora. Ubi Cáritas…
  • Caridad es acompañar y alegrarse con las personas que sueñan.
  • Caridad es caminar con humildad con lo que necesitan luz. Ubi Cáritas
  • Caridad es encontrar para los otros lo que necesitan para vivir dignamente.
  • Caridad es comprender a los que se desesperan con la sociedad, con el mundo y con la vida.

Ubi cáritas ….

  • Caridad es perdonar a los que por las circunstancias de la vida son pesados, inconstantes, mentirosos.
  • Caridad es buscar la justicia cada día y para cada persona que ha perdido su dignidad. Ubi cáritas….
  • Caridad es testimoniar nuestra fe y nuestra esperanza. Ubi Cáritas

B) ORAR                  
Padre, aleja este cáliz.
Pero tú sabes bien que el Padre no quiere alejar el cáliz,
tú sabes que lo tuyo es beberlo…entero…
Tú serás condenado a muerte  por haber vivido
la justicia y la misericordia:
tu gran pecado es ser el justo de Dios.
Suda sangre, Señor, Rey de los judíos…
Mil y mil muertes están sobre ti.
Tu sufrimiento es único: tiene talla de Dios.
Tu amor es único: tiene talla de Dios.
Lo imposible así tú ya lo estás haciendo posible
y los cielos y la tierra volverán a ver la Alianza.

Canto: “Tierra firme”

Tierra firme, te siento en mis pies descalzos.
Luna llena, testigo de mi llanto amargo.
Esta noche reseca está mi alma y pienso
Que este cáliz no puedo consumirlo entero.

  1. ¡Cómo arrecia este viento,
    quiere empujarme a morir!
     No seré como hoja seca,
    mi otoño será vivir.
  1. Siento que llega la hora,
    mis labios deben callar,
    hablaré con mi cuerpo,
    quien mire comprenderá.
  • En esta noche de olivos,
    desierto de soledad,
    sólo una cosa te pido:
    se cumpla tu voluntad.

Un discípulo de Jesús:
            Lo recuerdo bien, fue una noche que no olvidaré jamás; me acuerdo de sus palabras. Me dejaron impresionado.
            Se le notaba abatido. Nos dijo: “Mi alma está triste hasta el punto de morir; quedaos aquí y velad conmigo”. Incluso se tiró a la tierra y suplicaba así: “Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa, pero no sea como yo quiero sino como quieras Tú”.
            Dándose la vuelta nos encontró a muchos dormidos y nos dijo: “Velad y orad para que no caigáis en tentación, que el espíritu está pronto, pero la carne es débil”.
            Su oración fue difícil. Volvió a repetir: “Padre mío, si esta copa no puede pasar sin que yo la beba, hágase tu voluntad”.
            Al rato le cambió el rostro. Nos dijo: “ahora ya podéis descansar y dormir. Mirad, ha llegado la hora en que el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores…”.
            Mientras estaba hablando llegó Judas con un grupo de hombres armados y ya sabéis lo que pasó. Tras una pequeña riña se lo llevaron. Todos quedamos desconcertados, sin saber qué hacer.

Canto: Quedaos aquí, y velad conmigo.  Velad y orad, velad y orad.

1.- Vela del Dolor
            Aquella noche el sufrimiento y el dolor hasta se respiraba. Pero frente a esto Él se comportó con amor solidario. Aceptó su sufrimiento con amor porque sabía que era para los demás. Incluso trató con cariño a Judas, lo llamó “amigo”..

Monitor:
            El dolor de Getsemaní se extiende hasta nuestros día; una manifestación que se vive día tras día, por eso le pedimos la Padre que nos ayude a transformar nuestro dolor en amor y nuestras vidas en un amor justo y solidario para con los demás.

Canto y (se enciende la 1ª vela)
“Nada te turbe, nada te espante, quien a Dios tiene nada le falta.
“ Nada te turbe, nada te espante,  solo Dios basta.

2.- Vela del Miedo
            Jesús tuvo miedo. Sus palabras así lo indican: “Pase de mí este cáliz”.
            Sin embargo choca la segunda parte de la súplica: “No se haga mi voluntad sino la tuya”. Jesús estaba lleno de confianza.

Monitor
            Y es que toda su vida fue un acto de confianza en las manos de Dios. Él nos enseño a dirigirnos a Dios diciendo: “Hágase tu voluntad”. Cuando teníamos miedo, nos comentaba que si Dios se ocupa de los pájaros y de las plantas, ¿cómo no se iba a preocupar de nosotros?

Canto y (se enciende la 2ª vela) “Nada te turbe, nada te espante, ….

3.- Vela de la Violencia
            Aquella noche fue muy violenta, tanto que hasta Pedro sacó la espada e hirió a un sicario. Sin embargo Jesús no se defendió. Es más reprendió a Pedro. La paz de la que tanto nos habló la puso en práctica en este momento tan dramático.

Monitor
            La Violencia tampoco nos ha abandonado desde entonces. La vivimos, la palpamos y la vemos herida constantemente. Guerras interminables, agresividad, violencia machista, abuso sobre los débiles…

Canto y (se enciende la 3ª vela) “Nada te turbe, nada te espante….     

4.- La vela de la Opresión
            Se lo llevaron preso, sin embargo hablaba con entera libertad. “¿Habéis salido a prenderme con espadas y palos como si fuera un salteador? Todos los días me sentaba en el templo a enseñar y no me detuvisteis”, les decía.

Monitor:
            Señor, haznos hombre y mujeres luchadores de la libertad, capaces de resistir la tentación de buscar la felicidad propia olvidándonos de los demás. Danos fuerza para decir no al egoísmo, a la discordia, a la desesperanza, al odio, a la violencia a la irresponsabilidad, a la mediocridad. Haznos fuertes en el compromiso por la dignidad de la persona, por la fraternidad, la justicia y el amor. Haznos libres como tú, Señor.

Canto y (se enciende la 4ª vela) “Nada te turbe, nada te espante….

Peticiones:

  • Por los que son perseguidos y torturados: Dales tu fuerza y compasión.
  • Por los que sufren depresión y tristeza: Dales tu fuerza y esperanza.
  • Por los que sienten miedo: Dales tu fuerza y confianza.
  • Por los que se sienten solos: Dales tu fuerza y amistad.
  • Por los que están desconsolados: Dales tu fuerza y tu consuelo.
  • Por los que son traicionados: Dales tu fuerza y tu perdón.
  • Por los que son cobardes: Dales tu fuerza y seguridad.
  • Por los que son violentos: Dales tu fuerza y tu paz.
  • Por los que son despojados: Dales tu fuerza y tu riqueza.
  • Por los que no tienen techo, ni papeles: Dales tu fuerza y tu familia.
  • Por cuantos viven en algún infierno: Dales tu fuerza y tu liberación
  • Por los que….

Padrenuestro

Canto: “En mi debilidad”
En mi debilidad, me haces fuerte.
En mi debilidad, me haces fuerte.
Sólo en tu amor me haces fuerte.
Sólo en tu vida me haces fuerte.
En mi debilidad, Te haces fuerte en mí.